Alan Ball, creador de la exitosa serie de televisión True Blood no comparte la idea de vampiros célibes desplegada por la saga Crepúsculo, concretamente con la relación entre Bella Swan (Kristen Stewart) y Edward Cullen (Robert Pattinson). Para él los vampiros han de destilar sexo.
True Blood protagonizó una impactante portada en la revista Rolling
Stone. En la cual se podía ver a sus tres protagonistas totalmente
desnudos, en una posición más que sugerente y abundantemente salpicados
por un rojo elemento que asemejaba sangre.
Alan Ball habló acerca de la saga Crepúsculo y comentó que no le entra en la cabeza una serie de vampiros adolescentes y que no practiquen sexo. Para él "los vampiros son sexo". Además no comprende que puedan existir vampiros adolescentes, puesto que le parecen "irritantes".
Alan Ball habló acerca de la saga Crepúsculo y comentó que no le entra en la cabeza una serie de vampiros adolescentes y que no practiquen sexo. Para él "los vampiros son sexo". Además no comprende que puedan existir vampiros adolescentes, puesto que le parecen "irritantes".
Tal vez ahora, con la tan comentada escena de sexo en
Amanecer de Crepúsculo, Alan Ball se quede satisfecho. Aunque eso sí,
True Blood le lleva una gran ventaja en lo que a ese tipo de escenas se
refiere...